La pasión de votar en esta Partidocracia

Juan Carlos Girauta, miembro del partido político Ciudadanos y diputado en el Congreso, participó en el programa nº 299 de La Escóbula de la Brújula (Podium Poscast) del 2 de agosto de 2019 para hablar sobre “Ocultismo y Política”, y alrededor del minuto 36 expresó que “todavía hoy se vota por razones, lamentablemente, mucho más emocionales que racionales. Y esas emociones se pueden manipular y se manipulan a través de la vista y el oído”. En realidad, no es que Girauta dijera nada completamente nuevo (más bien lo novedoso es que dichas palabras salgan de la boca de un político de esta Partidocracia), pues es sobradamente conocido el uso que desde siempre se ha hecho de las emociones en todo tipo de sistemas políticos, países y épocas. Lo interesante de la cuestión es intentar comprender hasta qué punto y cómo la emoción puede anular la razón de los votantes en el actual Estado de Partidos. En ese sentido, Antonio García-Trevijano ya nos habló, en su obra Pasiones de Servidumbre, de la “Pasión de votar”, exponiendo, entre otros pensamientos, los siguientes (págs. 253-257):

En el sistema de listas de partido, los electores votan por un impulso incontrolado del corazón, por sentimiento de debilidad del alma infantil de los adultos que necesitan identificarse con un padre adoptivo o un hermano mayor, por una propensión de la inseguridad moral a integrarse en la seguridad civil de una gran familia política (…) No se votan listas de partido por reflexión, por cálculo del propio interés. El voto no es un acto pensado por la razón o comprendido por el entendimiento (…) Los que podrían cambiar este modo infantil y grosero de votar, los partidos, no lo harán. Viven algo más que aferrados a él (…) La pasión de votar proviene de un sentimiento del deber derivado de otra pasión más profunda. En concreto, de la pasión de obedecer (…) La pasión de votar instrumenta la enajenación partidista del pueblo y asegura la vida de una clase gobernante oligárquica y degenerada.

Por su parte, el repúblico Manuel Ramos realizó la siguiente exposición introductoria de la obra Pasiones de Servidumbre de García-Trevijano: